· Dificultad: baja
· Tiempo de preparación: 20′
· Tiempo total: 50′
Aquí tenemos uno de esos platos mega-sencillos de elaborar y muy sabrosos, que preparé con Alba estas vacaciones de Navidad. La premisa era utilizar brócoli, que le fascina; bimi, que no había probado en su vida y champiñones, que nos encantan a Fati y a mí.
Y ¿cómo se nos ocurrió esa combinación de ingredientes? Sencillo, eran restos que tenía por el frigo y el congelador. Y qué amalgama mejor que ninguna otra cosa, que una salsa con nata y queso, sobre todo cuando le añades pimienta y curry.
Pues eso, un plato que no tiene ningún misterio, con el que puedes aprovechar una carne y unas verduras que tienes por el frigo y que te va a sacar una sonrisa por lo sabroso y delicioso. ¿Qué más se puede pedir?
– Para 4 personas –
Ingredientes
- 2 pechugas de pollo (600 g aprox.)
- 3 dientes de ajo
- 200 g de brócoli
- 100 g de bimi
- 200 g de champiñones
- 300 ml de nata líquida
- 150 g de parmesano reggiano
- 1 cucharadita de pimienta negra recién molida
- 1 cucharadita de curry en polvo
- 1/2 cucharadita de orégano seco
- 75 g de mantequilla
- Sal
Elaboración
- Cortamos el ajo en láminas finas, los champiñones en láminas no muy finas, el pollo en dados tamaño bocado, cada bimi en cuatro trozos y separamos los ramilletes del brócoli. Salpimentamos el pollo y le añadimos 1/2 cucharadita de curry. Rallamos el queso.
- Ponemos una sartén con la mitad de la mantequilla a fuego medio-bajo (4 sobre 10). Cuando espume, añadimos el ajo, hasta que esté dorado, unos 5 minutos.
- Incorporamos el pollo hasta que se dore por fuera, otros 5 minutos. Lo retiramos y reservamos.
- En la misma sartén y con los jugos del pollo, añadimos el resto de la mantequilla, la otra 1/2 cucharadita de curry, el brócoli, el bimi y los champiñones. Mantenemos a fuego medio-bajo (4 sobre 10) durante unos 10 minutos y removemos un par de veces.
- Añadimos la nata líquida, removemos bien y subimos a fuego medio-alto (6 sobre 10) durante unos 10 minutos.
- Añadimos el queso rallado, la cucharadita de pimienta negra y removemos hasta que el queso se derrita.
- Volvemos a poner el pollo en la sartén, el orégano y removemos bien durante un par de minutos.
Emplatado
Pasamos de la sartén a la fuente… y ¡listo!. Si queremos, podemos rematar con una hierba fresca en plan cilantro, hierbabuena…
Trucos y consejos
Como buen plato de aprovechamiento, podemos sustituir cualquier ingrediente por cualquier otro dentro del mismo tipo. Es decir, en lugar de pollo, utiliza dados de ternera, de cerdo o incluso de un pescado blanco. Y lo mismo pasa con las verduras y los hongos.
Si le añades unos frutos secos, como unos anacardos o unos piñones en el momento de incorporar las verduras, lo bordarás y le añadirás ese toque crujiente que siempre se agradece.